Amós 8

La canasta con fruta

1 Nuestro Dios también me permitió ver una canasta, en la que había fruta madura.

2 Entonces me preguntó:

—¿Qué es lo que ves, Amós?

Yo le respondí:

—Veo una canasta llena de fruta madura.

Entonces Dios me dijo:

—Israel está lleno de maldad. Ya no volveré a perdonar suspecados.

3 Está cerca el día en que convertiré los himnos del templo en tristes lamentos por los muertos. Ese día habrá tantos cadáveres que los arrojarán en cualquier parte. ¡Será mejor que se callen! Yo, el Dios de Israel, les juro que así es.

4 »Escúchenme bien:

Ustedes humillan a los pobres

y están acabando con ellos.

5 Para vender más caro el trigo

ustedes se la pasan deseando

que pronto termine el díasábado

y que pase la fiesta de fin de mes.

Sólo piensan en engañar a sus clientes,

usando pesas y medidas falsas.

6 Quieren venderlo todo,

¡hasta la cáscara del trigo!

Quieren hacer esclavos a los pobres

a cambio de unas monedas

o por el precio de unas sandalias.

7 »Pero yo soy el Dios de Israel,

y les juro que nunca olvidaré

sus malas acciones.

8 Por causa de todo esto,

la tierra misma temblará;

subirá como el agua del río Nilo,

y luego se hundirá por completo,

haciendo llorar a sus habitantes.

9 »Yo soy el Dios de Israel,

y les aseguro que ese día

el sol dejará de brillar;

el mediodía se convertirá en noche,

y toda la tierra quedará a oscuras.

10 Convertiré sus fiestas en velorios,

y sus canciones en tristes lamentos;

todos ustedes andarán de luto

y se raparán la cabeza;

andarán tristes y llenos de amargura,

como si hubiera muerto su único hijo.

11 »Yo soy el Dios de Israel,

y les aseguro que vienen días

en que haré que sientan hambre;

tendrán hambre, pero no de pan,

tendrán sed, pero no de agua;

¡tendrán hambre de oír mi palabra!

12 Andarán de este a oeste,

y de norte a sur,

con deseos de oír mi palabra,

pero yo no les hablaré.

13 »Cuando llegue ese día,

aun las muchachas más sanas

y los jóvenes más fuertes

se desmayarán de sed.

14 Además, caerán sin vida

los queadorabana losídolos

de Samaria, de Dan y de Beerseba.

Juraban en nombre de esos dioses,

creyendo que eran dioses vivos,

por eso no volverán a levantarse.»

Amós 9

Dios juzgará a su pueblo

1 Después de eso vi a Dios. Estaba de pie, junto al altar, y me dijo:

«Golpea la parte alta

de las columnas del templo,

para que el templo se derrumbe

y caiga sobre la gente.

¡Nadie escapará con vida!

Pero si alguno logra escapar,

morirá en el campo de batalla.

2 »No importa que se escondan

en lo más profundo de la tierra:

de allí los voy a sacar;

no importa que se escondan

en lo más alto del cielo:

de allí los voy a bajar.

3 Tal vez se escondan

en lo más alto del monte Carmelo,

pero yo mismo iré a buscarlos

y de allí los voy a sacar.

Tal vez se escondan de mi vista

en lo más profundo del mar,

pero yo mandaré una serpiente

para que los muerda.

4 Y si acaso sus enemigos

los llevan presos a otro país,

aun allí daré la orden:

“¡Que los maten a filo de espada!”

Voy a estar pendiente de ellos,

pero no para hacerles bien

sino para hacerles mal.»

El gran poder de Dios

5 Y yo les digo:

¡Nuestro Dios es todopoderoso!

Toca la tierra,

y ésta se desmorona;

la hace subir y bajar

como al agua del río Nilo,

haciendo llorar a sus habitantes.

6 Dios hizo su casa en el cielo,

pero puso las bases en la tierra.

Dios llama a las aguas del océano,

y las derrama sobre la tierra.

¡Nuestro Dios es todopoderoso!

Israel será castigado

7 Nuestro Dios ha dicho:

«Para mí, ustedes los israelitas

no son diferentes a otros pueblos:

a ustedes los saqué de Egipto,

a los filisteos los saqué de Creta,

y a los arameos los saqué de Quir.

8 Yo he visto que ustedes

también son un pueblopecador;

¡por eso los borraré del mapa!

Pero salvaré a losdescendientesde Jacob.

Yo soy el Dios de Israel,

y les juro que así lo haré.

9 »Pueblo de Israel,

ahora mismo daré la orden

de que ustedes sean sacudidos,

como se sacude el trigo

para limpiarlo de basura,

sin dejar caer un solo grano.

10 Todos ustedes piensan

que nada malo les pasará,

pero al final sus pecados

les causarán la muerte.

Dios reconstruirá a Israel

11 »Cuando llegue ese día,

haré que losdescendientesde David,

vuelvan a reinar sobre Israel.

Volverán a ser fuertes como antes.

12 Así, lo que quede de Edom

y de las otras naciones

volverá a ser de Israel,

el pueblo que alaba mi nombre.

Yo soy el Dios de Israel,

y les juro que así será.

13 »Ya está cerca el día

en que tendrán abundantes cosechas.

No habrán terminado de cosechar el trigo

cuando tendrán que volver a sembrar;

no habrán acabado de preparar el vino

cuando tendrán que plantar más viñas.

»¡En los cerros y en las colinas

correrá el vino como un río!

14 »Pueblo de Israel,

cuando llegue ese día,

los haré volver a su país.

Entonces reconstruirán sus ciudades

y volverán a habitarlas;

plantarán viñedos y beberán su vino,

sembrarán huertos y comerán sus frutos.

15 Yo mismo los plantaré en su tierra,

y nadie volverá a arrancarlos

de la tierra que les di.

Yo soy su Dios,

y les juro que así lo haré.»

Joel 1

El ataque de los saltamontes

1 Dios le dio un mensaje a Joel hijo de Petuel, y Joel se lo comunicó al pueblo de Israel:

2-4 «¡Pongan mucha atención

ustedes, jefes del pueblo,

y todos los que viven en este país!

¡Cuatroplagasde saltamontes

han venido sobre nuestra tierra

y han acabado con nuestras siembras!

¿Cuándo han visto ustedes algo así?

¡Ni siquiera losantepasadosde ustedes

vieron en su vida algo parecido!

»¡Cuéntenselo a sus hijos,

para que ellos, a su vez,

se lo cuenten a sus nietos,

bisnietos y tataranietos!

5 »¡Vamos, borrachos, levántense!

¡Despierten y pónganse a llorar,

pues ya no van a tener vino!

6 Una plaga de saltamontes

ha invadido nuestro país,

como si fuera un gran ejército.

Sus dientes tienen tanto filo

que hasta parecen leones furiosos.

7 Destruyeron nuestras viñas

y despedazaron nuestras higueras;

¡pelaron las ramas por completo!

8 »La gente llora desconsolada,

como la novia que llora de tristeza

porque se ha muerto su novio.

9 También lloran lossacerdotes

que están al servicio de Dios,

pues ya nadie lleva al templo

ofrendasde vino y de cereales.

10 »Ya no hay trigo,

ya no hay vino ni aceite,

pues los campos se secaron

y quedaron hechos un desierto.

11 »Ustedes, los campesinos,

y ustedes, los agricultores:

¡lloren de tristeza!

Ya se han perdido las cosechas

de trigo y de cebada;

12 ya se han secado los viñedos,

las higueras, los granados,

las palmeras, los manzanos

y todos los árboles del campo;

¡la gente misma ha perdido la alegría!

13 »Ustedes, los sacerdotes,

que sirven a Dios en el altar,

pónganse ropa de luto

y pasen la noche llorando,

pues ya nadie trae al templo

ofrendas de vino y de cereales.

14 Reúnan en el templo

a los israelitas y a sus jefes,

para queayuneny oren a Dios.

15 ¡Nuestro Dios viene!

¡Ya está cerca el día!

¡Será un día de destrucción

por parte del Todopoderoso!

16 »En nuestra propia cara

nos quitaron la comida;

nos quitaron la alegría de estar

en el templo de nuestro Dios.

17 La siembra de trigo se secó,

por eso están vacíos

todos nuestros graneros.

18 ¡Mugen nuestras vacas

y balan nuestras ovejas!

¡Los ganados se mueren de hambre

porque ya no encuentran pastos!

19 »Dios nuestro,

¡en ti buscamos ayuda

porque el fuego ha quemado

nuestros campos y nuestros bosques!

20 ¡También te piden ayuda

los animales del campo,

pues los arroyos están secos

y el fuego ha acabado con los pastos!

Joel 2

La invasión de un ejército enemigo

1 »¡Que toquen la trompeta en Jerusalén!

¡Que suene la alarma en el templo!

¡Que comiencen a temblar

todos los habitantes de este país!

¡Nuestro Dios viene!

¡Ya está cerca el día!

2 Será un día de gran oscuridad,

un día de nubes y de sombras.

»Un ejército grande y poderoso

se extenderá sobre los montes,

y caerá sobre toda la tierra

como las sombras al anochecer.

No hubo antes, ni habrá después,

otro ejército que se le parezca.

3 Ese ejército es como el fuego,

que quema todo lo que encuentra:

antes de su llegada,

la tierra es un paraíso;

después de su llegada,

la tierra queda hecha un desierto.

¡No hay nada que se le escape!

4 »Ese ejército de saltamontes

ataca como la caballería;

5 cuando saltan sobre los montes,

el ruido que hacen se parece

al que hacen los carros de guerra;

son como el crujido de hojas secas

que se queman en el fuego;

son como un ejército poderoso

que está listo para el ataque.

6-9 »Estos saltamontes

parecen una banda de ladrones,

son como un ejército

que ataca por sorpresa la ciudad,

y siempre ataca de frente.

Escalan las murallas,

se trepan a las casas,

se meten por las ventanas,

sin chocar unos con otros.

Todos mantienen el paso,

jamás rompen la formación,

¡jamás dan un paso atrás!

¡Ni una lluvia de flechas

puede hacer que se detengan!

Al ver estos saltamontes

la gente tiembla

y se pone pálida de miedo.

10 Tiemblan el cielo y la tierra,

se oscurecen el sol y la luna,

y pierden su brillo las estrellas.

11 »Al frente de este ejército,

que es muy grande y poderoso,

Dios deja oír su voz de mando

y este ejército lo obedece.

Nuestro Dios viene.

¡El día de su llegada

será impresionante y terrible!

¡Nadie podrá mantenerse firme!

El pueblo de Dios debe arrepentirse

12 »Nuestro Dios nos dice:

“¡Arrepiéntanse ahora mismo

y cambien su manera de vivir!

¡Lloren,ayuneny vístanse de luto!

13 ¡Arrepiéntanse y vuelvan a mí,

pero háganlo de todo corazón,

y no sólo de palabra!

Yo soy tierno y bondadoso,

y no me enojo fácilmente;

yo los amo mucho

y estoy dispuesto a perdonarlos”.

14 »¡Tal vez Dios decida perdonarnos!

¡Tal vez nos dé en abundancia

vino y cereal para lasofrendas!

15-16 »¡Toquen la trompeta en Jerusalén!

¡Que se reúna todo el pueblo!

¡Que vengan los ancianos y los niños,

y hasta los recién casados!

¡Que ayunen y se preparen paraadorara Dios!

17 ¡Que vengan lossacerdotes,

los servidores de Dios!

Que se paren ante el altar,

y con lágrimas en los ojos

oren de esta manera:

“¡Dios nuestro,

perdona a tu pueblo!

¡No permitas que las naciones

nos desprecien y nos humillen!

No permitas que con tono burlón

nos pregunten:

‘¿Dónde está su Dios?’”

Dios ama a los que se arrepienten

18-19 »Dios ama mucho a esta tierra,

por eso nos tendrá compasión

y nos responderá:

“Pongan mucha atención:

Voy a llenar sus graneros de trigo,

y sus bodegas de vino y de aceite.

No volveré a permitir

que las naciones los humillen.

20-21 A ese enemigo del norte,

que se atrevió a atacarlos,

lo arrojaré al desierto;

a los que venían al frente

los ahogaré en el Mar Muerto,

y a los que venían atrás

los ahogaré en el Mediterráneo.

¡Sus cadáveres despedirán mal olor!”

»Patria mía, ¡no tengas miedo!

Al contrario, llénate de gozo,

pues Dios hace grandes maravillas;

¡sí, Dios hace grandes maravillas!

22 »Bestias salvajes, ¡no tengan miedo!

Los campos se cubrirán de pasto,

los árboles se llenarán de frutos,

y habrá higos y uvas en abundancia.

23 »Ustedes, habitantes de Jerusalén,

¡hagan fiesta en honor de nuestro Dios!

En el momento justo

Dios nos enviará la lluvia,

como lo hacía en tiempos pasados.

Como prueba de su perdón,

hará que llueva en primavera,

así como llueve en invierno.

24 Así habrá una buena cosecha,

y tendremos gran abundancia

de trigo, vino y aceite.

25 »Dios habrá de devolvernos

todo lo que perdimos estos años

por culpa de los saltamontes

que él mandó contra nosotros.

26-27 Tendremos mucha comida,

y alabaremos a nuestro Dios

por todas las grandes maravillas

que ha hecho en favor nuestro».

Dios promete enviar su espíritu

Dios le dijo alprofeta:

«Yo soy el Dios de los israelitas.

Yo vivo en medio de mi pueblo.

Ellos me reconocerán como su único Dios,

pues no hay otro como yo.

¡Y no volverán a ser humillados!

28 »Cuando esto haya pasado,

les daré a todos mi espíritu:

hombres y mujeres hablarán de parte mía;

a los ancianos les hablaré en sueños

y a los jóvenes, envisiones.

29 »También en esos tiempos

daré mi espíritu

a los esclavos y a las esclavas.

30 »Daré muestras de mi poder

en el cielo y en la tierra:

habrá sangre y fuego,

y grandes columnas de humo.

31 El sol dejará de alumbrar,

y la luna se pondrá roja,

como si estuviera bañada en sangre.

»Esto pasará antes de que llegue

el maravilloso día

en que juzgaré a este mundo.

32 Pero yosalvaré

a los que me reconozcan como su Dios.

Mi templo está en Jerusalén,

y en esta ciudad vivirán

los que hayan escapado,

junto con mis elegidos.

Joel 3

Dios juzgará a las naciones

1 »Cuando llegue ese día,

haré que los de Judá y de Jerusalén

vuelvan de las naciones

a donde los llevaron prisioneros.

2-3 Reuniré a todas las naciones

en el valle de Josafat,

y las declararé culpables

por todo lo que le hicieron

a mi querido pueblo Israel:

lo dispersaron por todas partes,

y echando suertes entre ellos

se repartieron su territorio;

vendieron como esclavos

a los niños y a las niñas,

¡y con ese dinero compraron

vino para emborracharse,

y les pagaron a las prostitutas!

4 »Ciudades de Tiro y de Sidón,

no les conviene ponerse en mi contra.

Y a ustedes, provincias de Filistea,

no les conviene desquitarse conmigo,

porque yo les daré su merecido

más pronto de lo que piensan.

5 Ustedes se han robado

todo mi oro y toda mi plata;

¡mis más ricos tesoros

se los llevaron a sus templos!

6-7 »Ustedes, gente de Tiro y de Sidón,

se llevaron muy lejos a la gente de Judá;

a los habitantes de Jerusalén

los vendieron como esclavos.

Pero yo los rescataré;

los haré volver de Grecia,

donde ustedes los vendieron.

»Ahora yo haré con ustedes

lo mismo que hicieron con mi pueblo:

8 venderé a sus hijos y a sus hijas

al pueblo de Judá,

para que ellos los revendan

a lastribusdel desierto.

Les juro que así lo haré».

El profeta anuncia el juicio

9 ElprofetaJoel les dijo a las naciones vecinas:

«¡Preparen sus ejércitos!

¡Prepárenlos para la batalla!

¡Dios les declara la guerra!

10 ¡Conviertan sus herramientas

en armas de guerra!

¡Conviertan a los más cobardes

en hombres de valor!

11-12 »¡Vengan, naciones vecinas!

Reúnanse pronto en el valle de Josafat.

¡Allí Dios las juzgará

y las declarará culpables!

13 Dios las cortará como al trigo

cuando está listo para la cosecha;

las aplastará como a las uvas

cuando están listas para hacer vino.

¡Ya es demasiada su maldad!

14 »Mucha gente se ha reunido

en el Valle de la Decisión,

porque allí llegará nuestro Dios.

¡Cercano está el día de su llegada!

15 Cuando Dios llegue,

se oscurecerán el sol y la luna,

y perderán su brillo las estrellas;

16 temblarán el cielo y la tierra,

y nuestro Dios se enojará

y hablará desde Jerusalén.

Pero protegerá a los israelitas

y será un refugio para ellos».

Habla Dios

17 Dios le dijo a su pueblo:

«Cuando llegue ese día,

ustedes reconocerán que yo soy su Dios.

Me quedaré a vivir en mi templo,

y Jerusalén será mi ciudad preferida.

¡Nunca más un ejército extranjero

volverá a poner un pie en ella!

18 »Cuando llegue ese día,

en los cerros y en las colinas

habrá vino y leche en abundancia;

y nunca faltará el agua

en los arroyos de Judá,

pues del templo saldrá un manantial

que regará el valle de Sitim.

19 »A Egipto y a Edom

los convertiré en un desierto,

porque atacaron sin motivo

a los habitantes de Judá,

y en su propio país

mataron a gente inocente.

20-21 Pero yo vengaré su muerte;

el culpable no quedará sin castigo.

Las ciudades de Judá y de Jerusalén

serán habitadas todo el tiempo,

y yo viviré en mi templo

para castigar al culpable

y defender al inocente».

Oseas 1

Oseas se casa con una prostituta

1 Dios le habló alprofetaOseas hijo de Beerí, cuando Jeroboam hijo de Joás era rey de Israel. Esto sucedió durante los reinados de Ozías, Jotam, Ahaz y Ezequías en Judá.

2 Lo primero que Dios le dijo a Oseas fue lo siguiente:

«Ve y cásate con una prostituta,

y ten hijos con ella,

porque los israelitas me abandonaron,

y se comportaron como las prostitutas».

3 Oseas obedeció y se casó con Gómer, la hija de Diblaim. Ella quedó embarazada y tuvo un hijo.

4-5 Entonces Dios le dijo a Oseas:

«El rey Jehú ha cometido muchos crímenes

en el valle de Jezreel.

Por lo tanto, en ese mismo valle

derrotaré a su ejército.

Castigaré a susdescendientes

y acabaré con el reino de Israel.

Por eso, a tu hijo

le pondrás por nombre Jezreel».

6 Tiempo después, Gómer volvió a quedar embarazada y tuvo una hija. Entonces Dios le dijo a Oseas:

«A esta niña la llamarás Lo-ruhama,

que quiere decir “no-compadecida”,

porque no volveré a perdonar

ni a tener compasión

de los habitantes del reino de Israel.

7 Sólo tendré compasión

de los habitantes del reino de Judá.

Yo mismo los salvaré,

y para eso no necesito ejércitos

ni armas de guerra».

8 Cuando Gómer dejó de darle pecho a Lo-ruhama, volvió a quedar embarazada; pero esta vez tuvo un hijo.

9 Entonces Dios le dijo a Oseas:

«A este niño lo llamarás Lo-amí,

que quiere decir “no-mi pueblo”.

Porque los israelitas ya no son mi pueblo

y yo he dejado de ser su Dios.

10 Pero un día los del reino de Israel

volverán a ser como la arena del mar,

que no se puede contar.

»Cuando llegue ese día,

ya no volveré a decirles:

“Ustedes no son mi pueblo”;

al contrario, les diré:

“Ustedes son mi pueblo,

porque yo soy el Dios de la vida”.

11 Ese día será grandioso,

pues yo les devolveré

a los reinos de Judá y de Israel

la grandeza que tuvieron.

Volverán a ser una sola nación;

tendrán un solo rey,

y volverán a Jerusalén

los que fueron llevados a otros países.

Oseas 2

1 El día que vuelvan,

los hombres serán llamados

“Pueblo de Dios”,

y las mujeres serán llamadas

“Compadecidas”».

Gómer representa a Israel

2 Dios también dijo:

«Para mí, Israel fue como una esposa,

pero me fue infiel

y ya no tengo nada que ver con ella.

¡Así que ustedes, israelitas,

preséntenla ante los jueces!

¡Que deje de portarse como una cualquiera!

¡Que deje de complacer a sus amantes!

3 »Si no lo hace, la desnudaré;

¡la mostraré tal como vino al mundo!

¡La rechazaré,

y no volveré a tener hijos con ella!

4 No tendré compasión de sus hijos,

porque esos hijos no son míos.

5 »¡Israel se comporta

como una desvergonzada!

Todo el tiempo anda diciendo:

“Voy a buscar a mis amantes,

pues ellos son los que me dan

todo lo que me hace falta:

me alimentan, me visten,

me perfuman y me divierten”.

6-7 »Irá en busca de sus amantes,

pero no podrá alcanzarlos

ni tampoco los encontrará.

Yo voy a encerrarla

en una cerca de espinos,

para que no pueda salir.

Allí se pondrá a pensar:

“Me iba mejor con mi primer marido,

así que voy a volver con él”.

8 »Ella no quiere reconocer

que soy yo quien la alimenta

y le da todo lo que le falta;

¡hasta oro y plata le he dado

y con ellos se hizoídolos!

9 Por eso voy a quitarle

todo eso que le he dado,

10 y ante sus amantes

la desnudaré y la avergonzaré.

¡De ésta no se va a salvar!

11 »Voy a ponerles fin

a sus fiestas de cada semana,

de cada mes y de cada año;

¡ya no volverá a alegrarse!

12 »Ella siempre presume

de las muchas higueras y viñas

que le han regalado sus amantes;

pero yo las voy a destruir

y las convertiré en matorrales;

¡los animales salvajes las devorarán!

13 »Cuando visita a sus amantes

se pone joyas y les lleva regalos,

pero a mí me tiene olvidado.

Por eso la voy a castigar,

pues haadoradoa dioses falsos.

»Yo soy el Dios de Israel,

y les juro que así lo haré.

Dios perdonará a su pueblo

14 »A pesar de todo eso,

llevaré a Israel al desierto,

y allí, con mucho cariño,

haré que se vuelva a enamorar de mí.

15 Le devolveré sus viñas,

y convertiré su desgracia

en granbendición.

Volverá a responderme

como cuando era joven,

como cuando salió de Egipto.

16-17 Ya no volverá a serme infiel

adorandoa otros dioses,

sino que me reconocerá

como su único Dios.

»Yo soy el Dios de Israel,

y les juro que así será.

18 »Cuando llegue ese día,

me comprometo a que los israelitas

vivirán tranquilos y en paz.

No habrá animal que les haga daño

ni pueblo que les declare la guerra.

19-20 »Israel, Israel,

yo volveré a casarme contigo

y serás mi esposa para siempre.

Cuando tú seas mi esposa,

realmente llegarás a conocerme;

seré para ti un esposo fiel,

sincero y lleno de amor.

21 »Yo soy el Dios de Israel,

y te juro que así será.

»Israel, cuando llegue ese día,

yo haré que el cielo

derrame su lluvia sobre la tierra,

22 y que la tierra produzca

trigo, vino y aceite en abundancia,

y así el valle de Jezreel prosperará.

23 Te daré la tierra,

y serás solamente para mí.

Y te diré: “No eras mi pueblo,

pero ahora ya lo eres”;

Tú, por tu parte, me dirás:

“¡Y tú eres mi Dios!”»

Oseas 3

Oseas y su esposa infiel

1 Dios volvió a decirme:

«Oseas, tu esposa te es infiel:

tiene un amigo que es su amante.

También los israelitas me son infieles,

puesadorana dioses falsos

y comen de lasofrendasque presentan.

Sin embargo, ve y ama a tu esposa,

así como yo amo a los israelitas».

2 Yo, Oseas, le pagué al amante de mi esposa quince monedas de plata y le di trescientos treinta kilos de cebada, para que ella volviera a vivir conmigo.

3 Y luego le dije a ella:

«Ya eres mía,

y vivirás conmigo mucho tiempo.

Si tú prometes serme fiel,

yo también te seré fiel,

aunque por un tiempo

no viviremos como esposos».

4 Lo mismo sucederá con los israelitas: Durante mucho tiempo no tendrán rey ni jefe; tampoco podrán presentar ofrendas a Dios, ni sabrán lo que Dios quiere que hagan; además, no tendránsacerdotesniídolosfamiliares.

5 Después de esto, se arrepentirán. Cuando llegue el tiempo del fin, volverán a obedecer a Dios y pedirán susbendiciones, y también seguirán el ejemplo del rey David.

Oseas 4

Pecados de los israelitas

1-2 ¡Escuchen, israelitas, el mensaje de su Dios! Él les dice:

«Yo tengo un pleito

contra ustedes, los israelitas.

Ustedes no son sinceros,

ni aman a su prójimo.

Todo el mundo mata y roba,

miente y jura en falso,

y no es fiel en su matrimonio.

Por todos lados hay violencia.

¡Nadie me reconoce como su Dios!

3 Por eso todos en el país

lloran y se desaniman,

y van desapareciendo

los animales de la tierra,

del cielo y del mar.

4 »Mi acusación

es sólo contra lossacerdotes,

¡nadie más es responsable!

5 De día y de nochepecan,

y hacen pecar a losprofetas;

¡por eso destruiré a su descendencia!

6 »Mi pueblo no ha querido

reconocerme como su Dios,

y por eso se está muriendo.

¡Ni los sacerdotes me reconocen!

Por eso no quiero que sigan

sirviendo en mi templo.

Ya que olvidaron mismandamientos,

yo también me olvidaré de sus hijos.

7 »Mientras más sacerdotes había,

más gente pecaba contra mí;

por eso, en vez de premiarlos,

los voy a humillar.

8 Con lasofrendasque da mi pueblo

para el perdón de sus pecados,

ustedes hacen negocio.

Por eso hacen todo lo posible

para que el pueblo siga pecando.

9 »La verdad es que castigaré

tanto al pueblo como a los sacerdotes,

10 pues ambos se han alejado de mí.

Por eso, aunque coman mucho,

siempre se quedarán con hambre;

y por más que traten de tener hijos,

jamás llegarán a tenerlos.

Israel adora a los ídolos

11 »¡Por andar con prostitutas

y emborracharse con vino,

han perdido la cabeza!

12 Es tan fuerte su deseo sexual

que prefieren andar con mujerzuelas;

por eso se han apartado de mí.

»¡Es increíble!

Mi pueblo le pide consejos

a un pedazo de madera;

¡quiere que un simple palo

le ayude a adivinar el futuro!

13 Suben a lo alto de las colinas,

y bajo la sombra de los árboles

presentanofrendasa sus dioses;

¡sus hijas y sus nueras

se portan como unas mujerzuelas!

14 Pero yo no voy a castigarlas

por tener sexo con tantos hombres,

pues ustedes mismos tienen sexo

con mujeres que adoran a otros dioses.

»¡Un pueblo que pierde la cabeza,

acaba por destruirse!

15 Si ustedes, israelitas,

siguen adorando a otros dioses,

¡por lo menos que Judá

no siga ese mal ejemplo!

¡Ya noadorena esosídolos

de Guilgal y Bet-avén!

¡Ya no juren en mi nombre!

16 Ustedes son muy rebeldes;

¡son más tercos que una mula!

No esperen que yo los trate

como si fueran mansos corderos.

17 »Si ustedes, israelitas,

quieren seguir adorando ídolos,

¡pues sigan haciéndolo!

18 ¡Mientras se emborrachan,

van en busca de mujerzuelas!

Prefieren la mala vida

a vivir como gente decente.

19 Por seguir adorando a esos ídolos,

van a quedar en vergüenza

y serán destruidos por completo.

Oseas 5

Mensaje contra Israel

1-2 »¡Escúchenme,sacerdotes!

¡Atiéndanme, jefes de Israel!

¡Préstenme atención,

familiares del rey!

Yo los voy a juzgar y a castigar

porque han engañado a mi pueblo.

¡Hicieron a Israel aun más rebelde!

Lo obligaron aadorara otros dioses

en los santuarios de Mispá y de Tabor.

3 »Israelitas,

yo sé cómo se portan ustedes;

¡se portan como una prostituta,

4 porque adoran a otros dioses!

No me reconocen como su Dios,

ni se arrepienten de su maldad.

5 Ustedes son tan malos y orgullosos

que acabarán por ser destruidos;

¡lo mismo pasará con Judá!

6 »Pero un día me buscarán;

y llevarán comoofrenda

sus vacas y sus ovejas,

pero no podrán encontrarme.

¡Yo los abandonaré!

7 Se han portado como unaadúltera:

me engañaron adorando a otros dioses,

y susdescendientesya no serán mi pueblo.

Por eso, muy pronto,

tanto ustedes como sus campos

serán destruidos.

Dios castiga a Israel

8 »¡Avísenles a todos en Guibeá,

Ramá y Bet-avén!

¡Den el toque de alerta!

¡Adviertan a los del reino de Judá!

9 Israelitas, yo les aseguro

que cumpliré lo que antes anuncié.

El día que yo los castigue,

¡dejaré su país en ruinas!

10 »Voy a castigar con furia

a los jefes de Judá,

porque son como los ladrones de terrenos:

han invadido el territorio de Israel.

11 El reino de Israel es maltratado

y nadie respeta sus derechos

porque prefirióadorara dioses falsos.

12 Por eso yo acabaré con ese reino

y con el reino de Judá;

¡los destruiré por completo,

como destruye la polilla a la madera!

13 Y cuando Israel y Judá

se vean en ruinas,

buscarán la ayuda del rey de Asiria;

pero él no podrá ayudarlos.

14-15 »Yo atacaré a Israel y a Judá

con la misma furia de un león.

Los agarraré y los haré pedazos,

y no habrá quien los salve.

Luego los dejaré por un tiempo,

y esperaré a que se arrepientan;

cuando reconozcan que me han ofendido,

se llenarán de angustia y me buscarán.»