Salmos 127

Los hijos son un regalo de Dios

(1a) Himno de Salomón para las

peregrinaciones

.

1 Si Dios no construye la casa,

de nada sirve que se esfuercen

los constructores.

Si Dios no vigila la ciudad,

de nada sirve que se desvelen

los vigilantes.

2 De nada sirve que ustedes

se levanten muy temprano,

ni que se acuesten muy tarde,

ni que trabajen muy duro

para ganarse el pan;

cuando Dios quiere a alguien,

le da un sueño tranquilo.

3 Los hijos que tenemos

son un regalo de Dios.

Los hijos que nos nacen

son nuestra recompensa.

4 Los hijos que nos nacen

cuando aún somos jóvenes,

hacen que nos sintamos seguros,

como guerreros bien armados.

5 Quien tiene muchos hijos,

bien puede decir

que Dios lo habendecido.

No tendrá de qué avergonzarse

cuando se defienda en público

delante de sus enemigos.

Salmos 128

Dios bendice a la familia

(1a) Cántico para las

peregrinaciones

.

1 ¡Diosbendice

a todos los que lo obedecen

y siguen sus enseñanzas!

2-3 Si tú eres uno de ellos,

Dios te bendecirá mucho.

En el seno de tu hogar

comerás y disfrutarás

de lo que ganes con tu trabajo.

Tu esposa tendrá muchos hijos.

¡Parecerá un racimo de uvas!

Nunca en tu mesa faltará comida,

y tus hijos crecerán

fuertes como los olivos.

4 ¡Así es como Dios bendice

a todos los que lo obedecen!

5 ¡Que Dios te bendiga

desde su templo en el monte Sión!

¡Que veas prosperar a Jerusalén

todos los días de tu vida!

6 ¡Que Dios te deje ver crecer

a tus hijos y a tus nietos!

¡Que haya paz en Israel!

Salmos 129

Dios es justo

(1a) Cántico para las

peregrinaciones

.

1 Dejemos que nuestra gente

nos hable de las angustias

que ha pasado desde su juventud:

2 «Hemos pasado muchas angustias

desde nuestra juventud,

pero no han podido vencernos.

3 El enemigo nos hirió la espalda;

¡nos hizo profundas heridas,

como quien abre surcos

con un arado!

4 Pero Dios es justo

y nos libró de los malvados».

5 ¡Que sean derrotados

y puestos en vergüenza

todos los que odian a Jerusalén!

6 ¡Que se marchiten como la hierba

que crece en el techo de la casa!

7 Esa gente es como la hierba,

de la que no se ocupan

ni los que la cortan

ni los que la recogen.

8 Cuando pasan, nadie los saluda;

y si saludan, nadie les contesta.

Salmos 130

Nuestra esperanza está en Dios

(1a) Cántico para las

peregrinaciones

.

1 Dios mío, yo te llamo

pues estoy muy angustiado.

2 ¡Escúchame, Dios mío!

¡Presta oído a mis gritos

que te piden compasión!

3 Si tomaras en cuenta

todos nuestrospecados,

nadie podría presentarse ante ti.

4 Pero tú nos perdonas.

¡Por eso mereces nuestraadoración!

5 En Dios he puesto mi esperanza;

con toda el alma confío en él,

pues confío en sus promesas.

6 Con ansias espero a Dios;

¡con más ansias lo espero

que los vigilantes a la mañana!

Los vigilantes esperan

que llegue la mañana,

7 y tú, Israel, esperas

la llegada de Dios

porque él nos ama

y nos da plena libertad.

8 ¡Dios salvará a Israel

de todos sus pecados!

Salmos 131

Estoy tranquilo y confío en Dios

(1a) Cántico de David para las

peregrinaciones

.

1 Dios mío,

yo no me creo más que nadie,

ni miro a nadie con desprecio;

no hago alardes de grandeza,

ni pretendo hacer grandes maravillas,

pues no podría llevarlas a cabo.

2 Más bien, me he calmado;

me he tranquilizado

como se tranquiliza un niño

cuando su madre le da el pecho.

¡Estoy tranquilo como un niño

después de haber tomado el pecho!

3 Israel,

¡pon tu esperanza en Dios

ahora y siempre!

Salmos 132

Las promesas de Dios a David

(1a) Cántico para las

peregrinaciones

.

1-2 Dios poderoso de Israel

acuérdate de David y de sus sufrimientos;

recuerda lo que él te prometió:

3-5 «Dios poderoso de Israel,

No pondré un pie en mi casa,

ni me daré un momento de descanso;

no dormiré un solo instante,

y ni siquiera cerraré los ojos,

mientras no encuentre un lugar

donde construir tu templo».

6 Cuando estábamos en Efrata

oímos hablar delcofre del pacto,

y finalmente lo hallamos

en la ciudad de Quiriat-jearim.

7 Entonces dijimos:

«¡Vayamos al templo de Dios!

¡Arrodillémonos ante su presencia!»

8 Dios mío,

¡ven con el cofre de tu pacto,

que es símbolo de tu poder,

al templo donde vivirás para siempre!

9 Tussacerdotesse vestirán

con propiedad,

y tu pueblo cantará con alegría.

10-11 Dios mío,

tú elegiste a David

para que fuera nuestro rey;

¡no le niegues tu apoyo!

También le hiciste este juramento,

y no dejarás de cumplirlo:

«Tusdescendientesserán reyes;

¡yo los haré reinar!

12 Si ellos cumplen

con mi pacto y con mis leyes,

también serán reyes sus hijos

y reinarán en tu lugar para siempre».

13 Tú elegiste a Jerusalén

para vivir siempre allí.

Dijiste:

14 «Aquí pondré mi templo.

Aquí reinaré siempre,

porque así lo he decidido.

15 Bendeciréricamente

los alimentos de esta ciudad,

y con abundante pan

calmaré el hambre de sus pobres.

16 Vestiré a sus sacerdotes

con ropas de triunfo,

y el pueblo cantará con alegría.

17 Aquí haré que renazca

el poder de David,

el rey que yo elegí;

aquí reinarán para siempre

sus descendientes.

18 Sobre la cabeza de David

brillará siempre la corona;

sobre la cabeza de sus enemigos

brillará la vergüenza».

Salmos 133

La unidad entre hermanos

(1a) Cántico de David para las

peregrinaciones

.

1 ¡No hay nada más bello

ni más agradable

que ver a los hermanos

vivir juntos y en armonía!

2 Es tan agradable ver esto

como oler el buen perfume

de lossacerdotes,

perfume que corre

de la cabeza a los pies.

3 Es tan agradable

como la lluvia del norte

que cae en el monte Hermón

y corre a Jerusalén, en el sur.

A quienes viven así,

Dios losbendice

con una larga vida.

Salmos 134

Alabemos a Dios

(1a) Cántico para las

peregrinaciones

.

1 ¡Alaben a Dios todos ustedes,

que están a su servicio!

¡Alábenlo también ustedes,

los que en su templo

le cantan himnos por las noches!

2 ¡Levanten las manos para orar!

¡Dirijan la mirada hacia el altar,

y alaben a Dios!

3 ¡Que Dios,

creador del cielo y de la tierra,

tebendigadesde su templo!

Salmos 135

Alabanzas a Dios

1 ¡Alabemos a Dios!

¡Alábenlo ustedes,

los que lo obedecen!

2 ¡Alábenlo ustedes,

que siempre están en los patios

del templo de nuestro Dios!

3 ¡Alabemos a Dios

porque él es bueno!

¡Cantémosle himnos,

porque él es bondadoso!

4 ¡Nuestro Dios eligió a Israel

para que siempre fuera su pueblo!

5 Yo sé que nuestro Dios,

es más poderoso que todos los dioses.

6 Dios hace lo que quiere

en el cielo y en la tierra,

en el mar y en sus profundidades.

7 Dios nos trae las nubes

desde lo más lejano de la tierra.

Dios nos manda los relámpagos

que anuncian la lluvia.

Dios saca el viento

del lugar donde lo tiene guardado.

8-9 En Egipto hirió de muerte

al hijo mayor de cada familia;

también les quitó la vida

a las primeras crías de los animales.

Hizo señales ymilagros

contra el faraón y sus oficiales,

10 hirió de muerte a muchos pueblos,

y acabó con reyes poderosos:

11 acabó con Sihón, el rey amorreo;

acabó con Og, el rey de Basán;

¡acabó con todos los reyes cananeos!

12 A su pueblo Israel le entregó

las tierras de esos reyes

para que fueran suyas para siempre.

13 Dios mío,

¡tú vives para siempre!

14 Tú defiendes a tu pueblo

y le tienes compasión.

15 Los dioses de otros pueblos

son hechura humana;

¡sonídolosde oro y plata!

16 De nada les sirve tener boca,

porque no pueden hablar;

tienen ojos, pero no pueden ver;

17 tienen orejas, pero no pueden oír;

¡ni siquiera pueden respirar!

18 ¡Pues iguales a esos ídolos

son quienes los hacen

y quienes creen en ellos!

19 Israelitas, ¡bendigana Dios!

Sacerdotes, ¡bendigan al Dios de Israel!

20 Levitas, ¡bendigan a Dios!

Ustedes, los que lo obedecen,

¡bendigan al Dios de Israel!

21 ¡Alabemos a nuestro Dios,

el Dios que vive en Jerusalén!

¡Alabémoslo!

Salmos 136

Dios nunca deja de amarnos

1 ¡Alabemos a Dios, porque él es bueno!

¡Dios nunca deja de amarnos!

2 Alabemos al Dios de dioses.

¡Dios nunca deja de amarnos!

3 Alabemos al Señor de señores.

¡Dios nunca deja de amarnos!

4 Sólo Dios hace grandes maravillas.

¡Dios nunca deja de amarnos!

5 Dios hizo los cielos consabiduría.

¡Dios nunca deja de amarnos!

6 Extendió la tierra sobre el agua.

¡Dios nunca deja de amarnos!

7 Hizo los astros luminosos.

¡Dios nunca deja de amarnos!

8 Hizo el sol, para alumbrar el día.

¡Dios nunca deja de amarnos!

9 Hizo la luna y las estrellas,

para alumbrar la noche.

¡Dios nunca deja de amarnos!

10 En Egipto hirió de muerte

al hijo mayor de cada familia.

¡Dios nunca deja de amarnos!

11 Sacó de Egipto a Israel.

¡Dios nunca deja de amarnos!

12 Allí mostró su gran poder.

¡Dios nunca deja de amarnos!

13 Partió en dos el Mar de los Juncos.

¡Dios nunca deja de amarnos!

14 Hizo que Israel cruzara el mar.

¡Dios nunca deja de amarnos!

15 Hundió en el mar

al faraón y a su ejército.

¡Dios nunca deja de amarnos!

16 Guió a Israel por el desierto.

¡Dios nunca deja de amarnos!

17 Derrotó a reyes poderosos.

¡Dios nunca deja de amarnos!

18 Quitó la vida a reyes famosos.

¡Dios nunca deja de amarnos!

19 Hirió a Sihón, el rey amorreo.

¡Dios nunca deja de amarnos!

20 Hirió a Og, el rey de Basán.

¡Dios nunca deja de amarnos!

21 Entregó a su pueblo,

las tierras de esos reyes.

¡Dios nunca deja de amarnos!

22 Ésa fue la herencia de Israel.

¡Dios nunca deja de amarnos!

23 Dios no se olvidó de nosotros

cuando nos vio derrotados.

¡Dios nunca deja de amarnos!

24 Nos libró de nuestros enemigos.

¡Dios nunca deja de amarnos!

25 Alimenta a toda su creación.

¡Dios nunca deja de amarnos!

26 ¡Alabemos al Dios del cielo!

¡Dios nunca deja de amarnos!